En una instalación industrial, el flujo de aire inadecuado o excesivo hacia el captador de polvo puede tener consecuencias preocupantes para los profesionales de EHS. Un flujo de aire inadecuado puede ser incapaz de mantenerse al día con la generación de polvo de su proceso, lo que puede causar que se superen los límites del valor de referencia deseados. Si el captador no puede absorber el polvo hasta la tolva, el polvo puede depositarse dentro de los conductos o en la instalación. Esta acumulación de polvo puede actuar como combustible adicional en caso de incendio.
El flujo de aire excesivo también puede aumentar el riesgo de incendio. Por ejemplo, las chispas de su proceso pueden arrastrarse a través de los conductos hasta el captador de polvo, donde el polvo puede proporcionar una fuente de combustible. Otras consecuencias no deseadas del flujo de aire excesivo incluyen el desgaste prematuro del filtro o incluso la pérdida de ingredientes valiosos en su proceso.
Al igual que en la detección de tendencias de partículas, el servicio iCue ™ proporciona una lectura relativa del flujo de aire. Una vez que su instalación ha determinado un flujo de aire para las necesidades de control de polvo de su instalación, las desviaciones superiores o inferiores al 10 % del valor de referencia pueden indicar un problema del captador de polvo que debe abordarse.
Las tendencias en el flujo de aire también pueden ayudar a identificar un problema en el diseño del conducto. Si el flujo de aire está constantemente por debajo del flujo de aire diseñado, es posible que sea necesario ajustar la red de conductos o el tamaño del ventilador. A veces, las instalaciones expanden y atan una estación de trabajo adicional a un captador existente, con lo que debilitan el flujo de aire. Si está remodelando su planta, pida a un experto en captación de polvo que le ayude a mantener el flujo de aire equilibrado y supervise el sistema con el servicio iCue™. Las fluctuaciones en la velocidad del aire pueden llevar al personal cualificado a reequilibrar su sistema de filtración de aire.
Algunos aspectos sobre la gestión del captador de polvo
Estos tres indicadores (presión diferencial, tendencias de partículas y tendencias del flujo de aire) tienen directa incidencia para los líderes de EHS con relación al seguimiento y la presentación de informes. Sin embargo, la gestión óptima del captador de polvo también puede ser una preocupación que compartan sus colegas de ingeniería y mantenimiento de instalaciones. Para su beneficio común, hay sensores adicionales disponibles para aumentar el servicio de filtración conectado iCue™, específicamente para supervisar los tapones de la tolva, el nivel del depósito, la alimentación de aire comprimido y la humedad. La supervisión continua de estos indicadores puede ayudar a detectar problemas a tiempo, administrar el coste total de propiedad del captador de polvo y generar una rentabilidad adicional para el servicio iCue™.