Hy-Pro, que fue fundada en 1986, tiene sede en Anderson, Indiana, y cuenta con 110 empleados. Hy-Pro genera ingresos anuales de aproximadamente 25 millones de dólares gracias a las ventas de sistemas de filtración y de recambios para una amplia gama de industrias, incluida la fabricación, el procesamiento de metales y la generación de electricidad.
Donaldson finalizó la adquisición de Hy-Pro el 1 de mayo de 2017. Para obtener más información sobre Donaldson, visite el sitio de relaciones con los inversores en IR.Donaldson.com.
Las declaraciones en este comunicado sobre los sucesos y expectativas futuros, como los pronósticos, planes, tendencias y proyecciones respecto a los negocios de la Empresa y su rendimiento financiero son declaraciones prospectivas dentro del significado de la Ley estadounidense de reforma de litigios sobre valores privados de 1995, y se pueden distinguir por términos o expresiones como "probablemente resultará", "se espera que", "seguirá", "permitirá", "estimar", "proyectar", "creer", "esperar", "anticipar", "pronosticar" y otras expresiones similares. Estas declaraciones prospectivas solo se refieren hasta la fecha en que dichas declaraciones son realizadas y están sujetas a los riesgos y las incertidumbres que podrían provocar que los resultados de la Empresa difieran sustancialmente de estas declaraciones. Estos factores incluyen, entre otros, las condiciones económicas mundiales y del mercado industrial; la capacidad de la Empresa de mantener ciertas ventajas competitivas frente a sus competidores; las presiones de precios; la capacidad de la Empresa de proteger y hacer valer sus derechos de propiedad intelectual; la dependencia de la Empresa en las transacciones globales; la concentración de clientes en ciertas industrias cíclicas; la disponibilidad y precio de los productos básicos; la implementación de nuevos sistemas de tecnología de la información; la seguridad de la información y las violaciones de datos; las fluctuaciones de las divisas; las leyes y regulaciones gubernamentales; los cambios en las leyes y regulación tributarias y los resultados de las revisiones; la capacidad de la Empresa para atraer y conservar al personal clave; los cambios en los mercados de capital y de crédito; la ejecución de la estrategia de adquisiciones de la Empresa; la posibilidad del deterioro de los activos intangibles y del renombre; la ejecución de los planes de restructuración; la capacidad de la Empresa de mantener un sistema de control interno eficaz para los informes financieros. Estos riesgos e incertidumbres están descritos en el apartado1A del informe anual de la empresa, en el formulario 10-K para el año finalizado el 31 de julio de 2016. La empresa hace estas declaraciones a la fecha de esta divulgación y no asume obligación alguna de actualizarlas a menos que la ley exija lo contrario.
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