Las regulaciones de seguridad alimentaria se extienden más allá de los consumibles humanos a la mayoría de los productores de alimentos para mascotas. Las instalaciones que producen alimentos para mascotas están sujetas (entre otros) a los reglamentos europeos CE/767/2009 y CE/1831/2003.
Debe contar con un plan integral de análisis de peligros y puntos críticos de control (HACCP) o un plan de análisis de peligros y controles preventivos basados en riesgos (HARPC), que incluya la filtración adecuada del aire, el agua y el vapor utilizados en su proceso.
Cada instalación de alimentos para mascotas tendrá necesidades únicas, pero en general, hay al menos 13 ubicaciones donde la filtración es crítica para la seguridad de su producto y equipo. Estos son solo algunos ejemplos:
- Fuente de agua: Agua municipal o de manantial utilizada para alimentar calderas o sistemas de limpieza in situ (CIP) y vapor in situ (SIP).
- Agua como ingrediente: Agua de procesado que se utiliza para ajustar la cantidad de humedad durante la mezcla del producto.
- Vapor de nivel culinario: El vapor se usa para acondicionar la carne o para cocinar productos en latas a temperaturas específicas.
- Extrusión: Vapor a alta presión que conforma los alimentos en su forma y tamaño final.
- Aire comprimido: El aire usado para secar el equipo después de lavarlo.
Trabajar con una empresa de filtración con experiencia le ayudará a desarrollar una filtración que sea a la vez rentable y que cumpla con los requisitos.
Ofrecemos estos recursos complementarios como punto de partida: