Desde las poderosas excavadora hasta los pequeños minicargadores, ningún sistema hidráulico puede funcionar sin su elemento vital: el fluido hidráulico. Pero, ¿alguna vez se ha preguntado exactamente qué es el fluido hidráulico? En este artículo analizamos el fluido hidráulico y todo lo relacionado con él, incluida la contaminación hidráulica, el lavado hidráulico, los tipos de filtros hidráulicos y lo que debe hacer si tiene la mala suerte de sufrir una inyección de fluido hidráulico.
Un sistema hidráulico utiliza un fluido (en lugar de componentes rígidos) como medio flexible para realizar trabajos en el sistema. Pero eso no es todo lo que hace el fluido hidráulico: también proporciona una lubricación esencial que reduce la fricción y la abrasión; y desvía el calor para que no llegue a los componentes críticos, lo cual mejora el rendimiento y prolonga la vida útil de su equipo. El líquido de frenos y el líquido de dirección asistida de nuestros vehículos son ejemplos de fluido hidráulico con los que estamos más familiarizados.
Existen distintos tipos de fluido hidráulico para cada situación. Entonces, ¿qué fluido hidráulico debe utilizar? Según el sistema, es posible que desee un fluido a base de agua o de petróleo; puede ser natural/biodegradable o sintético. ¡Algunos tipos especializados son incluso retardantes de llama! La maquinaria agrícola a menudo utiliza fluido hidráulico biodegradable, mientras que los equipos pesados tienden a usar productos sintéticos a base de petróleo. Independientemente del fluido hidráulico que utilice, asegúrese de mantener la uniformidad y no rellene con un producto de otro fabricante. También es importante que tome muestras de su fluido hidráulico regularmente en busca de agua y contaminación. Siga las recomendaciones del fabricante sobre las propiedades del fluido hidráulico.
La contaminación del fluido hidráulico es posiblemente el talón de Aquiles de cualquier sistema hidráulico. Entre un 70 y 80% de las fallas de los sistemas hidráulicos se pueden atribuir a contaminantes en el fluido. Y con los equipos generalmente sucede que las presiones más altas y las tolerancias más estrictas aumentan la susceptibilidad del sistema a la contaminación y los residuos. Esto puede implicar reparaciones y reemplazos costosos que afectan el retorno de su inversión.
Desafortunadamente, es inevitable que haya cierta contaminación, ya sea incorporada o generada durante la operación del sistema, o aquella causada por contaminantes externos no deseados que ingresan al sistema. Afortunadamente, puede minimizar la contaminación del fluido hidráulico si utiliza filtros de calidad, como los producidos por Donaldson, y si realiza lavados regulares.
El uso y mantenimiento de un filtro hidráulico de buena calidad es una de las principales formas de abordar el problema de la contaminación, ya que mantiene cada componente funcionando de manera óptima y, en última instancia, prolonga la vida útil de su sistema en general. Invertir dinero en filtros de buena calidad siempre es una decisión inteligente. En Donaldson nos hemos dedicado a producir productos y soluciones de filtración de alta calidad durante más de 100 años: llevamos la tecnología de filtración en nuestro ADN.
Existen diferentes tipos de filtros hidráulicos adaptados a diferentes usos y tipos de fluidos hidráulicos, y Donaldson produce opciones para aplicaciones de presión baja, media y alta. Por ejemplo, un filtro de drenaje de caja ofrece protección contra el exceso de presión que se acumula en la línea de drenaje de su caja. Si la presión aumenta demasiado, los sellos comienzan a ceder, ¡e incluso la cubierta podría salir disparada del motor!
Reemplazar los respiraderos desecantes convencionales por respiraderos T.R.A.P. (Protección avanzada de reacción térmica) de Donaldson proporciona protección contra la humedad del aire y la contaminación por partículas. La tecnología T.R.A.P elimina el vapor de la humedad de la admisión de aire y lo expulsa de regreso a la atmósfera. No solo eso, sino que los respiraderos T.R.A.P. ofrecen 3 veces la capacidad de retención de suciedad de los respiraderos desecantes convencionales.
Lavar el fluido hidráulico no significa simplemente cambiarlo. Lavar el fluido hidráulico es una tarea mucho más complicada y se recomienda llevarla a cabo siempre que falle un componente (como una transmisión final o una bomba), o si se ha reconstruido un componente crítico o una máquina completa. Implica primero drenar el fluido hidráulico y luego hacer circular por el sistema un fluido de menor viscosidad a alta presión. Esto remueve la suciedad y los residuos del sistema, dejándolo limpio y preparado para que introduzca fluido hidráulico nuevo. En resumen: la práctica recomendada es cambiar el fluido con regularidad y lavarlo cuando sea necesario.
Cuando el fluido hidráulico está bajo presión, puede tener fuerza suficiente como para penetrar su piel. Esto se conoce como inyección de fluido hidráulico y sus consecuencias pueden ser graves y, en algunos casos, fatales. Debido a que la lesión puede parecer leve, como una picadura de abeja o un pinchazo con un alfiler, suele pasar inadvertida e ignorarse. Si está buscando fugas de fluido, nunca debe hacerlo directamente con las manos desnudas; en su lugar, use un trozo de cartón limpio y seco u otro material para evaluar el área. Si tiene la mala suerte de sufrir una picadura/herida y sospecha de una lesión por inyección, no se arriesgue: ¡busque atención médica! La herida puede parecer insignificante; ¡pero las posibles consecuencias no lo son!
Hemos analizado los diferentes tipos de fluido hidráulico, cómo se produce la contaminación y qué hacer al respecto, y hemos dado un vistazo a los diferentes tipos de filtros hidráulicos. La importancia del fluido hidráulico no se puede subestimar. Y si está invirtiendo dinero en el fluido adecuado, vale la pena invertir tiempo, esfuerzo y dinero en mantenerlo en las mejores condiciones posibles. Compruebe regularmente el estado de sus filtros y cámbielos cuando se contaminen o se dañen. Cambie cada tipo de fluido hidráulico de acuerdo con las pautas del fabricante y lleve a cabo lavados cuando sea necesario. Sus sistemas hidráulicos se lo agradecerán y recompensarán su inversión con años de rendimiento prolongado.